Estructura familiar de los elefantes
Los elefantes son animales que viven en manadas. Sin embargo, este grupo se distingue del resto de los animales porque al frente del grupo se encuentra una matriarca, es decir una hembra, siempre la más vieja y experimentada.
¿Cuántos elefantes hay en una manada?
Una familia de elefante puede llegar a conformarse hasta por alrededor de 20 individuos. No obstante, lo más frecuente es que se conforme por la matriarca, de tres a cuatro hijas suyas, y la descendencia de estas, para alcanzar la cifra de 12 miembros. La matriarca solo abandona su posición al morir y es sustituida por una de sus hijas, que suele ser la mayor.
A modo de comunidad, las hembras se ayudan entre sí, siendo genial el apoyo que entre ellas se brindan durante el parto y a la hora de cuidar a las crías. Dentro del grupo suele haber una niñera, papel que encarna una elefanta joven pues esta actividad es tomada como una especie de práctica para su posterior maternidad.
Una manada puede dividirse para formar otras teniendo en cuenta el tamaño y la cantidad de alimento de las que se disponga. De tal forma, suele ser frecuente encontrar varias manadas interrelacionadas en una misma área, y aunque dejan de ser una se estima que siguen teniendo vínculos y comparten amistosamente en los abrevaderos y en los puntos comunes de alimentos.
También puede suceder que las manadas se imbriquen para formar clanes más grandes, en los cuales es posible definir a qué grupo pertenece cada individuo por el conjunto de gestos que se hacen entre ellos para comunicarse.
La manda en busca de alimentos
Debido a las grandes cantidades de alimentos que necesitan ingerir, los elefantes se mueven mucho en busca de comida. A la hora de emprender el camino, las crías de elefantes se sujetan a sus madres aguantando la cola de estas con sus trompas. En este periplo se intenta que los elefanticos estén bien protegidos por lo que son rodeados por los adultos lo más posible.
La reproducción de las elefantas es independiente. Como el grupo solo se encuentra conformado por hembras y machos jóvenes, las elefantas se aparean con algunos de los elefantes machos que encuentre. Luego del ritual de apareamiento y una vez montada la elefanta, el macho vuelve a su vida solitaria pues no tendrá nada que ver con el grupo y mucho menos con la educación de las crías.
Al crecer los elefantes machos deben abandonar la manada, mientras las hembras permanecen en ella, algunas, incluso hasta la muerte. A semejanza con los humanos, los elefantes crean fuerte lazos con sus familiares y amigos, al punto de lograr identificarse entre ellos al cabo de un tiempo sin verse.
De manera general, los elefantes pueden considerarse animales sociables que disfrutan de la unión familiar.
