¿Los elefantes tienen miedo a los ratones?
Uno de los mitos más conocidos que se conocen es el de que los elefantes tienen miedo a los ratones y que, cuando aparece uno delante de ellos, salen corriendo despavoridos. Esto es algo que hemos innumerables veces en dibujos animados e incluso en muchos cuentos, pero ¿qué tiene esto de cierto? En este artículo te vamos a contar todo lo que se sabe en la actualidad de esta pregunta y te daremos respuesta con todo lujo de detalles.
Miedo de los elefantes a los ratones: Mito o realidad
Como hemos comentado en la introducción, es más que habitual encontrarse unos dibujos animados en los que aparece un pequeño ratoncito que se acerca a un elefante y este corre como alma que lleva el diablo para que no se le acerque ni le toque, pero esto no tiene nada de cierto, es decir, se trata de un mito que vamos a ir explicando a continuación y paso a paso, ya que hay muchos estudios y datos que pueden serte de gran utilidad para conocer mejor esta creencia.
La primera de ellas proviene la antigua Roma, en la que nos encontramos al escritor y filósofo Plinio el Viejo, que vivió en el año 77 de nuestra era y que realizó un cuento o creencia en la que se hablaba de que los ratones eran capaces de subirse a la trompa de un elefante, introducirse por uno de los orificios nasales de su trompa para finalmente volverlo loco, creando estampidas o haciéndole correr y morir al instante.
Aunque hace un par de décadas, este relato se hizo realidad en un zoológico en el que un ratón bastante curioso realizó esta proeza cuando el elefante se encontraba durmiendo, muriendo después de un par de días a causa del roedor, que se había introducido dentro de la trompa del paquidermo, bien es cierto que esto es algo anecdótico y la probabilidad de que un ratón se introduzca en la trompa es casi nula.
Uno de los motivos por los que se piensa que un elefante puede sentirse inquieto por la aparición de un ratón es porque simplemente no lo nota tal como es, es decir, lo ve como una pequeña sombra que se pasea por delante suya, y todo esto debido a que los elefantes no tienen una vista muy buena, por lo que no llegan en ningún momento a identificar a estos animales a no ser que se encuentren muy cerca de sus ojos, algo que pocas veces ocurre, por lo que lo único que van a ver será una sombra que se mueve de un lado a otro y esto los puede asustar, pero nunca al punto de hacer que teman por sus vidas, para que puedas tener un ejemplo claro, si pusieras delante de un elefante una pequeña pelota que se va moviendo de un lado a otro, o cualquier otro animal del mismo tamaño que el de un ratón, con total seguridad asustaría también al elefante, ya que al no identificarlo y al sentir que se trata de algo que no puede controlar el movimiento que tienen, sienten que es un peligro para ellos y lo evitan a toda costa. (Fuente: Roedorespedia.com)
¿A qué tienen miedo los elefantes?
Si ya sabes que los elefantes realmente no tienen miedo a los ratones, sino que lo que les asusta es el movimiento que realizan y su tamaño reducido seguro que te preguntarás si estos animales, que son los más grandes que se encuentran en la superficie terrestre, temen a algo que realmente cuenten con estudios e investigaciones para afirmar que realmente sienten este miedo atroz.
La respuesta la vamos a encontrar en las abejas. Las abejas o avispas son insectos a los que los elefantes tienen un auténtico pavor y que cuando detectan que están cerca o que hay un panal en las inmediaciones intentan por todos los medios darse la vuelta y tomar otro camino. Se ha comprobado que las abejas o avispas no hacen daño a los elefantes en la piel, ya que esta es extremadamente dura y muy resistente, y una picadura de ellas no va a hacerles absolutamente nada, al contrario, quien sale perdiendo en este enfrentamiento con total seguridad es la abeja o avispa que perderán su aguijón y morirán a los pocos minutos de haber picado.
Sin embargo, los elefantes tienen partes blandas, zonas como los ojos, la boca o el interior de la trompa que sí son muy sensibles a cualquier toque y las avispas o abejas pueden acercarse a esta zona, provocando lesiones muy dolorosas y en ocasiones, inflamar los ojos o la trompa haciendo que el animal o no pueda ver o no pueda respirar correctamente, creándole un grave problema que puede traducirse en su muerte.
En África se ha estado realizando una serie de pruebas con las abejas y se ha comprobado que los elefantes, cuando detectan una colmena, dan la vuelta rápidamente y se van por el camino que habían venido, evitándolas y rodeándolas por varios metros de distancia. Esto ha hecho que muchos cultivadores e incluso habitantes, busquen una barrera protectora contra estos animales, situando en sus tierras gran cantidad de panales de abeja para que de esta manera, los elefantes no vayan a cruzar sus cultivos destrozándolos al pasar o bien alimentándose de ellos, haciendo que en esa casa haya ruina a causa de la destrucción casi total de su modo de vida. En el 80% de los casos, los animales buscarán otro camino y evitarán a las abejas. Por lo que, puestos a temer, lo harán más de estos insectos que de un simple ratón.
